La Tarjeta de Transporte Público Personal (TTP Personal) es intransferible. En ella figuran impresos el nombre y un número de identificación de la tarjeta, además de la fotografía del titular. El chip interior también se encuentra personalizado con las características de franja de edad (perfil) y descuentos (colectivo).

Está dirigida a todos los usuarios en general y es la opción estándar para los usuarios que superan los 7 años.

Este tipo de tarjetas son imprescindibles para cargar billetes vinculados a una persona concreta, como pueden ser los abonos 30 días, o bien para beneficiarse de algún descuento por edad, familia numerosa o discapacidad.

Pero también permiten cargar billetes no personales. Así, pueden contener un Abono Transporte (personal) y dos billetes no personales, o bien, tres billetes no personales.

Existen otros tipos de TTP Personal para determinados usuarios: